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Espectador.
jueves, 31 de enero de 2013
6:42 | 1 Comment |
Habían dos personas al fondo, se miraban, se rodeaban con sus ojos, dos personas al fondo, uno al frente del otro con esta fuerza que los empujaba y alguno que otro nudo en la garganta que los aprisionaba por varios minutos. Iban avanzando, deseando llegar a tocarse, sus manos, su cara, deseando poder abrazarse por fin, pero estaban allí uno al frente del otro, sonriendo, sin llegar ninguno a establecer el primer paso.Y entonces ella se libero de aquel nudo, gritando cuando quería abrazarle, pero aun seguían allí, inmóviles, uno frente al otro. Y sucedió el viento que invade el alma, y movieron todas las flores del mundo el aleteo de las mariposas, y sintieron este fuego inmenso en ellos, esta fuerza que permite cruzar cualquier océano solo para escuchar su voz, se regocijaron en todo ese nuevo mecanismo encendido en su interior, y corrieron, sus cuerpos chocaron y se entrelazaron tan fuerte, se abrazaron para nos soltarse jamas, para estar siempre juntos, para que esa sensación durara siempre, y llegaron los "te quiero" que vienen con el frío, se derramaron miles de tazas de café en parís y a muchas mujeres se les deshizo el peinado. El amor tiene fuerzas inimaginables y todo cambia cuando amanece el entre los hombres, la unión de los átomos, la sucesión de la primavera. Habían dos personas de fondo que se miraban uno frente al otro, y había un espectador... Un espectador que lo había soñado. Etiquetas: Fuga de ideas, historia de pequeños momentos, Rainbow sea comes |